¿Qué es el colágeno?

El colágeno es la proteína más abundante de nuestro cuerpo y el principal componente del tejido conectivo.
Por su bajo peso molecular es de rápida absorción, pudiendo ser detectados en el flujo sanguíneo luego de 15-30 minutos de haber sido ingerido.
La industria del sector nutricosmético lo ofrece en varias presentaciones, cápsulas o comprimidos, polvos para disolver con aguas o bebidas no alcohólicas, puros o saborizados y asociados con otros productos (ej. Coenzima Q10, Resveratrol).
Recorriendo la anatomía del cuerpo humano podemos darnos cuenta del papel trascendental del colágeno en la piel (acapara ¾ partes de su composición química), tendones y ligamentos (90% de su existencia es colágeno), córnea (64%), cartílagos (50% es colágeno), el hueso cortical (23%), arterias principales (12%), y hasta los pulmones (10%).
Al colágeno debemos atribuirle la misión estratégica de preservar la firmeza e integridad física de tejidos, órganos, aparatos y sistemas, así como un estado adecuado de hidratación.

¿Por qué consumirlo?

Proteínas altamente digeribles n la última década, creció el interés en proteger los niveles de colágeno en la piel, prevenir su E degradación y promover la síntesis de nuevo colágeno a medida que la piel envejece. Estudios científicos prueban que la síntesis de colágeno puede ser promovida mediante pequeños péptidos estimulantes obtenidos a partir de una fuente natural de colágeno. Los péptidos de colágeno son proteínas altamente digeribles. Estas proteínas, en su estructura original, no pueden ser absorbidas rápidamente en el tracto gastrointestinal. Mediante la destrucción o hidrolisis enzimática de la proteína en pequeños péptidos, se obtiene un producto que puede ser absorbido fácilmente por el cuerpo humano. Los péptidos de Colágeno WPN pueden ser fácilmente digeridos. Luego de la ingestión, se divide en péptidos aún más pequeños. Algunos de estos péptidos son especialmente “atraídos” a los fibroblastos. Numerosos estudios realizados a lo largo de la última década en fibroblastos animales y humanos prueban que los péptidos de colágeno estimulan al cuerpo a producir más de su propio colágeno mediante la activación de los fibroblastos.

Beneficios del colágeno hidrolizado

Los beneficios de un tratamiento con colágeno aparecen a largo plazo y solo cabe esperarlos si se integra en el día a día como un hábito más, con rigor y disciplina en las tomas del producto que se haya considerado. Consumir los preparados de colágeno es la opción más inteligente cuando se trata de suplir carencias en la nutrición en los siguientes casos:

• Por ser una persona de edad madura o un anciano
• Por padecer algún cuadro clínico con implicaciones nutricionales
• Por sufrir una enfermedad crónica que ocasione trastornos en la absorción de nutrientes, entre ellos las proteínas

Aunque el colágeno hidrolizado carece de todo peligro, pues apenas se registran reacciones adversas en su consumo, no por ello deja de ser recomendable pedir opinión médica antes de iniciar un tratamiento.
Hagamos un repaso de todos los beneficios que puede comportar:

— Tonifica la piel, la deja flexible y más resistente, disminuyendo sus irregularidades (arrugas, bolsas y líneas de expresión)
— Mantiene huesos y articulaciones en buenas condiciones
— Disminuye los dolores articulares
— Influye en buena medida en la regulación del sistema hormonal
— Estimula la digestión
— Evita la descalcificación de los huesos
— Potencia la fortaleza de los tejidos de las uñas y evita que se quiebren
— Refuerza el cuero cabelludo y estimula el crecimiento del cabello y aumenta su volumen
— Aumenta el rendimiento cardíaco y el de la musculatura estriada en general
— Trabaja en la regeneración de los órganos vitales
— Incrementa la elasticidad de los vasos sanguíneos y linfáticos
— Es un factor revitalizante porque fomenta la producción de energía

La importancia del consumo a partir de los 30 años

La disminución de la síntesis endógena de esta proteína da comienzo muy sutilmente alrededor de los veinticinco años, manteniendo a partir de entonces una reducción sostenida (cada 12 meses, la cantidad de colágeno en nuestro cuerpo disminuye el 1 %) que experimenta una caída brusca con la llegada de los cincuenta y especialmente de los sesenta. Esta evolución negativa, basada en la disminución de la capacidad de las células especializadas en sintetizar colágeno, explica algunas de las manifestaciones que acostumbramos a observar en personas de media y avanzada edad, como:

• Disminución de la elasticidad y la firmeza de la piel, que se traduce en la aparición de estrías, arrugas y áreas de flacidez, lo que da una sensación de envejecimiento precoz
• Fragilidad de los capilares sanguíneos, que provoca una frecuente y aparentemente sin causa formación de hematomas, los típicos moretones
• Dolores musculares característicos de la fibromialgia
• Dolores articulares propios de la artrosis, con especial incidencia en la articulación de la rodilla, pues el cartílago ve mermados su grosor y su resistencia, haciendo poco a poco que los huesos empiecen a friccionarse cuando se producen los movimientos articulares
• Incremento de la porosidad de la matriz del hueso, debido a una descalcificación paralela como consecuencia de la pérdida de las sales cálcicas que están adheridas al colágeno. Su consecuencia directa es un mayor riesgo de padecer osteoporosis

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